La situación deportiva del Real Jaén, con una serie de futbolistas lesionados (Nino, Gaitán, Quesada y Curto), el sancionado Nando, y los descartados para el resto de temporada, Edgar y Damián, supuso que Manolo Herrero tuviera que tirar del filial para tener fondo de banquillo. Para ello, convocó a Pablo Ortiz, José Molina y Diego, que finalmente no saltaron al césped de La Victoria. El técnico jiennense hizo dos cambios, dando entrada a Dani Torres y Óscar Rico, por lo que los tres futbolistas tendrán que esperar a la próxima oportunidad que le brinde el míster del primer equipo.