Juanjo Ballesteros // @jj_ballesteros
Aunque la semana pasada se repitiera hasta la saciedad; aunque las denuncias públicas han sido reiteradas; aunque los clubes han sido unánimes; aunque las medidas que se quieren adoptar a nivel nacional parecen sólidas. A pesar de todo, ha vuelto a ocurrir. El colegiado que decretó el partido de categoría Infantil entre el Úbeda Viva y el Bailén CP, P.M.J., fue agredido en la tarde de ayer en las inmediaciones del complejo deportivo municipal ‘Antonio Cruz’, por el padre de uno de los jugadores del conjunto bailenense. Pero cuando en el inicio del encuentro, los chavales mostraron una pancarta contra la violencia en el fútbol por los hechos ocurridos en Andújar la semana pasada, parece aún más grave.
El apoyo a ‘Kete’ quedó manchada por este suceso que sucedía en el choque que comenzó a las 12.00 horas y que finalizó con este episodio. El árbitro ha hablado con El Deporte de Jaén y ha apuntado que al finalizar el encuentro, el ‘aficionado’ del Bailén saltó al campo para increparle. Cuando el colegiado le comentó que no podía estar allí, comenzó a gritarle y a insultarle, mientras todavía los jóvenes jugadores estaban sobre el césped. Fue al salir del estadio, cuando P.M.J. fue agredido. El padre del jugador se dirigió al árbitro, “cogiéndome del cuello y propinándome un golpe en la cara”. Ante ello, salió corriendo y tomó la matrícula de su agresor para denunciarle.
El hecho colateral que puede ocurrir con este suceso es la reacción del colegiado, que apuntó a esta redacción que “posiblemente deje el arbitraje” después de lo sucedido.
Una auténtica pena que vuelva a quedar manchada la imagen futbolística por aquellos que dicen ser ‘seguidores’ o ‘aficionados’. Hay que remarcar que todos los partidos que ha disputado el CD Úbeda Viva este fin de semana, ha mostrado la pancarta de ánimo a ‘Kete’ y para denunciar cualquier gesto antideportivo en el mundo del fútbol.