Alejandro Copete // @Ale_Copete
La irregularidad y los malos resultados hicieron que la Real Balompédica Linense decidiera prescindir de Rafael Escobar, un nombre que sin duda será escrito con letras de oro en la Historia centenaria de la entidad tras 8 años consecutivos llevando el timón desde el banquillo. Le pudo le presión de intentar de nuevo el ascenso a Segunda División y la “Balona” ha estado toda la primera vuelta rondando los puestos de descenso. La primera victoria no llegó hasta la octava jornada y la derrota frente al Jumilla en el último partido de 2015 acabaron con la paciencia de la directiva que ha querido cumplir esa máxima de “Año nuevo, vida nueva” con la contratación de Manolo Ruiz, jerezano que se enfrenta al reto de ser el jefe tras haber sido ayudante en Primera División del alemán Bernd Schuster. Y lo hizo con un empate a 0 ante el UCAM, resultado muy positivo sabiendo la situación de cada uno. Sin embargo, 2016 promete ser también duro para el equipo de la Línea, que solamente está a 2 puntos del play-out y a 3 del descenso directo.
Ahora mismo la Recia Balona es una incógnita, como casi siempre que llega un entrenador nuevo. Ante los universitarios si mostraron un nuevo sistema táctico (4-1-4-1) que buscaba más la sobriedad y la defensa, punto débil de este equipo con muchísima pólvora delante con jugadores como Espinar (7 goles), Juampe (5 goles y buenos minutos contra el UCAM) y Zamorano (3 goles); pero con deficiencias atrás que han costado muchos puntos, ya que solamente en 5 partidos en todo lo que llevamos de temporada no habían permitido los blanquinegros encajar gol. Ese primer 0-0 para la Balompédica Linense sabe casi como un triunfo, al igual que la magnífica trayectoria en copa que ha servido de bálsamo hasta la eliminación contra el histórico Athletic. A primera vista, equipo tienen para remontar y por lo menos no sufrir mucho, aunque de algunos jugadores se esperaba algo más, como el central Roberto Chen, del Málaga o Copi, 18 goles el año pasado y solamente 1 de momento. Quienes sí parecen más asentados en el once es el centrocampista Ximo Former y Manu Palancar tras su regreso a la Línea de la Concepción.
Al Municipal de la Línea llega la pareja más productiva en lo que a goles se refiere de todo el grupo IV de la Segunda división B. Es la oportunidad de corregir los errores y cumplir el primero de los propósitos de año nuevo de la Balona. La afición, como es lógico, se divide entre los que pedían un cambio y los que pedían la continuidad de Escobar, pero ante todo está el apoyo y, quizás algunos lo sigan imaginando, el sueño de remontar puestos y conseguir estar de nuevo, como en los años anteriores, en la zona noble de la tabla.