Cabezas de serie número dos del Master, no es mera casualidad que Miguel Benítez y Dani Muñoz se postulen como los candidatos a plantar cara a Luque y Ortega. En el deporte, la suerte suele ser flor de un día, habitualmente el trabajo sustituye a la suerte en cuanto a resultados se refiere. Tras una temporada marcada por la regularidad de Benítez y la evolución de menos a más de Muñoz, esta pareja impregnará cada golpe con su ambición por ganar.
Sin rechazar cualquier opción, Miguel afronta este Master «igual que todos los torneos que disputo, con intención de dar lo mejor de mí, disfrutar y aprender de los rivales y de mi compañero». A este pensamiento, Dani añade que «este año tengo como objetivo llegar a la final y dar guerra en esa final». La adaptación a la pareja rival resultará fundamental según Benítez mientras que Muñoz se centra en aplicar las ganas de jugar y vencer.
No hay dudas de que Muñoz y Benítez mirarán de reojo a Antonio Luque y Juan Ortega, con intención de luchar por arrebatarles el cetro que ostentan. El conocimiento de las parejas dificulta la aparición de sorpresas aunque esperan que la competición sea vibrante y emocionante, lo cual será buena señal. Los dos jugadores no pierden de vista el próximo año, en el que aspiran a mantener su nivel de juego y evolucionar para crecer en la pista.