Emilio Antolín // @EmilioAntolin
Undécima jornada de Liga 1|2|3 y undécima ocasión de los jugadores jiennenses para luchar por el objetivo de sus respectivos equipos en la presente temporada. Una ambición para la que, a tenor de sus actuaciones, unos están ayudando más que otros.
No en vano, Moyano y Juan Cámara se quedaron con las ganas de aportar su granito de arena en el empate del Valladolid ante el Lugo (2-2), del lado del defensor, y en la victoria del Reus a domicilio ante el Almeria (0-1), por parte del atacante. Ninguno de los dos contó con minutos, una situación recurrente que comienza a ser preocupante.
Sí pisaron el verde, aunque sin demasiada suerte, Javi Jiménez y Manu del Moral, que no pudieron hacer nada para evitar las derrotas de sus respectivos equipos. En este sentido, el Nástic de Javi Jiménez acusó en demasía la baja de su hombre-gol, Uche, y fue goleado por el Alcorcón en un duelo en el que jiennense estuvo apenas una hora sobre el césped. El zurdo dejó su sitio a Jean Luc en el 54 cuando su equipo ya perdía 0-2, siendo protagonista en el segundo de los tantos tras perder un balón en campo madrileño que desembocaría en un contragolpe perfecto del Alcorcón, culminando el mismo Dorca. Una derrota que, no obstante, mantiene a la escuadra catalana fuera de la zona de peligro, aunque igualada a puntos con el Albacete, club que marca el descenso.
Por su parte, el Numancia rompió su buena racha como local, donde había vencido en los últimos cinco enfrentamientos, cayendo derrotado ante el Granada (1-3), en un envite en el que Manu del Moral recuperó la titularidad. Fue sustituido, eso sí, pasada la hora de juego, tras una actuación modesta en la que apenas tuvo ocasiones de gol. El jiennense contó, no osbtante, con una muy clara en el minuto 63, cuando tras una gran maniobra se quedó solo ante el meta rival, que con el pie evitó en el último momento el tanto del ariete.
Por ultimo, la nota positiva de la jornada en clave jiennense la puso el Oviedo de Carlos Hernández y Anquela, que se reencontró con la victoria a costa del Córdoba, al que el nuevo entrenador no le sirvió para evitar la derrota por 2-0. El zaguero jiennense, como viene siendo habitual, fue el ‘jefe’ de la defensa asturiana, aportando contundencia y solidez en la retaguardia. Hernández tuvo un partido complicado, la intensidad ofensiva del Córdoba fue enorme y los ataques constantes, pero el cero que mantuvo su equipo hasta el final habla a las claras de su buen hacer una semana más.