Emilio Antolín // @EmilioAntolin
… Pero con gol. Puede ser el resumen de la duodécima jornada de Liga 1|2|3 para los jiennenses de la categoría, pues ninguno de ellos logró sumar los tres puntos con sus respectivos equipos, pero al menos Manu del Moral se reencontró con el gol.
Y es que el ‘7’ del Numancia fue clave en el empate de su equipo ante el Córdoba, en un duelo igualado donde el ariete disputó 75 minutos en los que se convirtió en una pesadilla para los defensas andaluces. No en vano, pasada la media hora de juego aprovechó un pase tremendo de Valcarce al hueco para colarse entre la defensa califal y, con un derechazo imparable, adelantar al Numancia y celebrar su segundo gol de la temporada. No marcaba, de hecho, desde hacía un mes, concretamente desde el envite en el que los suyos golearon al Albacete, pero ha recuperado la puntería a tiempo para rescatar un valioso punto del Nuevo Arcángel.
Con un punto también cerró la jornada el Reus de Cámara, que empató a dos contra un Valladolid en el que Moyano volvió a quedarse fuera de la convocatoria. Sin noticias del lateral, el extremo jiennense sí que fue de la partida con la escuadra catalana, aunque su aportación desde la banda duró menos de una hora, pues dejó su sitio a Pablo Íñiguez en el 54. Antes de ser sustituido, Cámara lo intentó sin demasiada suerte y fue diluyéndose poco a poco hasta acabar en el banquillo.
Menos suerte tuvo el Oviedo de Anquela y Carlos Hernández, que fueron claramente superados por el Alcorcón en un encuentro donde los madrileños vencieron por 2-0. Abrumados desde el principio por el despliegue ofensivo de la escuadra local, Carlos Hernández y los suyos se defendieron con menos acierto del habitual y apenas se prodigaron en ataque, cosechando una derrota incontestable ante un Alcorcón que, simplemente, fue mejor.
Por último, la cara más negativa de la jornada la puso el Nástic de Javi Jiménez, que volvió a jugar los 90 minutos pero, en esta ocasión, poco pudo hacer para evitar la derrota de los suyos ante el Lugo. En un partido sin demasiado brillo y en el que el único gol llegó de rebote y tras una más que probable mano en el área (por lo que nunca debió subir al marcador), el jiennense cumplió sin alardes pero acabó perdiendo un encuentro con el que el Nástic vuelve a caer a los puestos de descenso.