Hace ahora un año la pandemia provocada por la Covid-19 evitó que Jaén Rugby celebrara como merecía el primer campeonato de su historia. Una pandemia que ha ido tejiendo una red de obstáculos que el club y la plantilla trata de superar jornada a jornada.
En esta última, la décimo tercera, el equipo jiennense sigue mirando hacia arriba a pesar de la derrota sufrida por 31 a 25 frente a AD Ingenieros Industriales en Las Rozas. Los jugadores de Jaén Rugby y su cuerpo técnico lo intentaron de todas las formas posibles, pero la ansiada victoria no llegó.
Sorprendieron los locales con dos rápidas jugadas en los primeros minutos que les colocaron con un marcador a favor de 12-0 cuando no se habían cumplido los primeros diez minutos. Lejos de amilanarse, el XV jiennense obligó a su rival a jugar en su campo gracias a una gran presión. Fruto de ella llegaría el primer ensayo de Jaén Rugby.
Ulises Raya culminaría una gran penetración de “Facu” Rutolo a la que dio continuidad Marco Gasparri. Los visitantes se imponían en las melés, en las touches y superaban al rival en los rucks. En el minuto 25, el colegiado no concede por balón adelantado el segundo ensayo a Jaén Rugby, pero comenzó un acoso diez minutos que Ingenieros Industriales sólo pudo frenar a base de infracciones.
Con cada golpe, una melé y con cada melé un nuevo golpe gracias a la superioridad jiennense. Así hasta que el colegiado del partido, José Luis Murillo, decidió pitar ensayo de castigo y sacar amarilla a un pilar madrileño.
Antes del descanso, cada equipo transformó un golpe castigo con lo que la primera parte finalizaría con 15-15 en el marcador. Un marcador igualado que no reflejaba el dominio en el juego del equipo verde oliva.
Jaén Rugby comenzó el segundo tiempo con el mismo ímpetu. Un placaje alto impidió un ensayo de Jako Irusta a los dos minutos, pero la presión dio su fruto al transformar Peio Gil otro golpe de castigo. Los jiennenses le habían dado la vuelta al marcador: de 12-0 a 15-18. Y lo había conseguido realizando el mejor juego exhibido en lo que llevamos de temporada.
La alegría duró poco. De nuevo una jugada rápida por el ala cerrado hizo mella en la defensa jiennense y provocó una infracción dentro de la veintidós visitante. El golpe fue transformado por el especialista azul y negro, Wayne Gardner, y el marcador se igualaba de nuevo.
Con el saque de centro el XV jiennense volvió a poner cerco a la zona de ensayo madrileña. Ingenieros Industriales es un equipo sólido y experimentado, defendía cada metro con fiereza.
El ataque jiennense supo sumar fases de juego y mover el balón con paciencia hasta que Facu Rutolo encontró la puerta por la que entrar hasta la zona de ensayo. Ensayo transformado por Peio Gil que dejaba un 18-27 en el marcador en el minuto 57 de partido.
Tocaba resistir. Y lo hizo Jaén Rugby con ese pundonor marca de la casa. Defendiendo y atacando, tratando de jugar en campo contrario. El partido había sido intenso, el desgaste comenzaba hacer mella y los técnicos apuraban las posibilidades de refresco que ofrecía el banquillo.
Sin embargo, faltó paciencia para controlar el juego y el partido, como se había logrado hasta ese momento, en los últimos siete minutos. El equipo madrileño sí supo explotar sus virtudes y en ese tiempo sumó trece puntos: un ensayo transformado y dos golpes de castigo.
Derrota por seis puntos de diferencia que permite al equipo jiennense sumar un punto bonus defensivo en esta visita a Las Rozas. Poco fruto para un equipo que fue claro dominador en todo el partido, tanto en ataque como en defensa.
El próximo fin de semana, sin apenas tiempo para la recuperación, Jaén Rugby vuelve a Madrid para jugar como local contra Majadahonda en El Valle del Arcipreste.