Miguel Ángel López, alias Superman, conquista la etapa reina de la Vuelta a Andalucía, con salida y meta en la provincia de Jaén y da un golpe clave para llevarse la general de la carrera
Diego M. Díaz Salado | @dmdiazsalado
A Superman López le mola Andalucía. El bravo ciclista colombiano, fichaje rutilante de Movistar para este 2021, ha vuelto a besar la gloria en la región más meridional de la vieja Europa continental.
El boyacense, tan buen escalador como irregular vueltómano, se ha bebido el mar de olivos hasta hacerlo suyo, haciendo buenos los pronósticos para alzar los brazos bajo el cielo de Villarrodrigo, uno de los puntos más al norte de Andalucía, y por ende, de la provincia de Jaén.
Y decimos que al genio de Boyacá le gusta nuestra querida autonomía porque las pocas veces que la ha visitado con un dorsal en el lomo las ha saldado con triunfos o puestos de mérito.
En la Vuelta a España del 17 se llevó dos de los fuertes finales en alto, el almeriense de Calar Alto y el granadino de Hoya de la Mora y cerca estuvo de meterse en el zurrón el tríptico montañoso andaluz de aquella edición de la ronda hispana si no fuera porque Majka le ganó en la Pandera, en el mismo suelo jienense en el que hoy ha triunfado.
López es un ciclista de raza. Bravío y temperamental. De esos que te hacen brincar del sofá o lo repudias por bocaclancas. Y, en cierto modo, fiable cuando el terreno pica para arriba, más allá de desconexiones puntuales que le han alejado de un palmarés más lustroso donde respingan dos podios en generales de Tour y Vuelta y etapa en el Tour del año pasado.
Hoy ha demostrado en Jaén que es el más fuerte de esta edición de la Vuelta a Andalucía y que mucho se tiene que torcer el panorama para que no se lleve el trofeo a casa. Para alegría, por supuesto, de sus huestes telefónicas.
Movistar lo fichó para esto, para recuperar pulso de victoria cuando no compita el sempiterno Valverde y para ensanchar bajo la pancarta de meta a esa M enorme que llevan por delante en el maillot.
Pero hablemos de la etapa. Del etapón, mejor dicho. De esos 177 kilómetros bajo un sol de justicia en los que no había un centímetro de llano. 5.000 metros acumulados son muchos metros. Muchas cuestas, mucho sudor y muchas piernas acalambradas.
Jaén, una vez más, lo ha vuelto a hacer. Ha vuelto a presentarse al mundo como un sitio en el que el ciclismo sube pulsaciones, te dilata las pupilas y te aflora la emoción. Hoy han sido seis puertos, dos de primera, dos de segunda y otros tantos de tercera desde que se salió de Segura de la Sierra.
Se sube, se baja, y así unas cuantas veces, hasta que, en el penúltimo puerto del día, el Collado de los Yesos, a 18 de meta, el menudo colombiano se ha quitado las gafas de Clark Kent -el azul ya lo llevaba puesto en forma de licra- y ha levando el vuelo para demostrar quién manda y cambiar su azul por el amarillo.
Sólo el holandés Tolhoek (Lotto Jumbo) pudo seguir, a duras penas, su estela, finalizando segundo y afianzando ese mismo lugar en la general, a 20 segundos.
Junto a ellos destaca el rendimiento del joven granadino Carlos Rodríguez (Ineos Grenadiers), uno de los imberbes del pelotón internacional con sus recién cumplidos 20 añitos.
Hoy ha sido séptimo y acecha el tercer escalón del podio de la general, que por ahora tiene bien asido Amezqueta (Caja Rural).
Antes del puñetazo de Superman, la etapa ganaba kilómetros con una escapada con mucho fundamento y representación española -y andaluza-, con Maté y Bizkarra (Euskaltel), Berrade (Kern Pharma), Dani Navarro (Burgos BH) o el ya citado Amezqueta (Caja Rural), entre otros foráneos, para hacer un total de 11 valientes del a ver si toca la flauta.
No llegaron, pero alguno de ellos sí estuvo en las posiciones delanteras finales. El hasta ahora líder, Hayter, llegó a más de dos minutos de Miguel Ángel López y pierde toda posibilidad de victoria final.
Con este etapón jienense, la provincia se despide del mejor ciclismo del mundo con buen sabor de boca. Lo hará por poco tiempo, ya que este año sí habrá andanada de la Vuelta en la tierra. Será el 25 y el 26 de agosto, con la fresquita, con sendas etapas que volverán a exhibir la majestuosidad del mar de olivos.
El 25 tenemos el plato fuerte, con final de etapa en Valdepeñas de Jaén y su ya clásica calle empedrada que tanto pica para arriba. Un final eléctrico que es sinónimo de emoción. El día siguiente habrá salida desde Jaén capital y meta en Córdoba, picante por según qué otros motivos, pero insulsa en cuanto a terreno ciclista. Bromas aparte.
Mientras tanto, la Ruta del Sur seguirá su rumbo en su 67 edición. Finalizada la visita a Jaén, mañana estará en la provincia de Granada, con salida en Baza y meta en Cúllar Vega. 183 kilómetros con, a priori, poca historia.
Muy lejos de la bestialidad de 5.000 metros acumulados de desnivel de hoy. Una jornada para esprinters o para una fuga capaz de desafiar al pelotón. Y el sábado, esfuerzo final, en Almería. Restan estos dos pequeños pasos para que el Superman aguante el liderato y ponga la copa de campeón de la Vuelta a Andalucía rumbo a cruzar el charco.
Esperemos verlo con ganas, ímpetu y su buena dicha con nuestra Andalucía en la próxima Vuelta a España, en la que parece que será de la partida. Calidad y piernas tiene para ello, solo falta que domestique un poco más el garbanzo. Que la sudada de hoy en Jaén le sirva como estímulo.
📹 El momento en el que @SupermanlopezN pasa por línea de meta para llevarse la 3a etapa de la @VCANDALUCIA. Por detrás pasa Tolhoek (TJV) y Piccolo (ISN). pic.twitter.com/fSXR1zQ8gM
— Vuelta a Andalucía (@VCANDALUCIA) May 20, 2021