Alejandro Copete // @Ale_Copete
Dos caras las de este Nástic de Tarragona, ya si que obligado a ascender a Segunda División tras el pinchazo que supuso el no conseguirlo en la pasada campaña, incumpliendo el objetivo propuesto.
Mientras que fuera de casa se muestra como un equipo dubitativo, en el Nou Estadi lleva doce puntos de doce posibles. Y en la visita del Linares Deportivo pueden conseguir un récord histórico si consiguen volver a ganar.
El conjunto grana roza los puestos de ascenso con 14 puntos gracias sobre todo a esa eficiencia como locales que el nuevo entrenador, todo un clásico de la Segunda y Segunda B como es Raúl Agné, ha sabido de momento inculcar al equipo.
Sin embargo, ya hay voces que critican el juego del equipo y el propio Agné ha ido probando otros sistemas como el 4-3-3 para paliar la falta de balón en la medular sin perder consistencia defensiva.
El conjunto tarraconense, a excepción de la portería y de la zona de ataque donde sí que se ha reforzado más, ha aprovechado el mercado de fichajes para completar plantilla con jugadores con experiencia en Segunda, Segunda B y hasta Primera División, como es el caso del central de 35 años Aythami, procedente de Las Palmas.
El guardameta Manu García, que viene de la Ponferradina, también cuenta con experiencia en categorías superiores, así como el delantero Édgar tras su paso por Sabadell y Reus. El ariete, junto a Carbia, son los autores de cinco de los ocho goles totales del Nástic.
Otros jugadores importantes en estos primeros partidos de la temporada son el interior derecho Del Campo (mucha experiencia en el extinto Grupo III de la Segunda B con el Olot), el centrocampista Robert Simón (fichado del Badalona) y el extremo Pablo, también conocedor del fútbol catalán tras estar en el Cornellá.
Siguen siendo importantes en el Gimnástic de Tarragona el central Quintanilla, el mediocentro Ribelles y el lateral zurdo Joan Oriol. Uno de sus jugadores estrella, el delantero Pedro Martín, de momento no está sabiendo encontrarse a sí mismo como goleador, pero nadie discute sus capacidades complementarias a su puesto.
Para el duelo ante el Linares Deportivo pueden darse los regresos de Albarrán y Pol Ballesteros tras sus lesiones, jugadores que en la pasada campaña eran futbolistas muy importantes para el conjunto grana.
Además de la motivación de seguir estando en la zona noble de la tabla, el Nástic tiene la de volver a hacer historia delante de su gente y sellar definitivamente el Nou Estadi como feudo inexpugnable.