Se acaba la participación del Tecnigen Linares en la mejor competición de clubes de Europa. Ahora toca pensar en la ETTU Cup, que es la segunda competición continental.
Las jugadoras del equipo linarense han realizado un sobresaliente partido en Francia, pero no ha sido suficiente para traerse el triunfo. Había que ganar con solvencia, pero lo más importante era dar una sobresaliente imagen y demostrar por qué estamos entre los 12 mejores clubes europeos.
En Francia, y con los inconveniente previstos e imprevistos por el viaje, las linarenses iban a por todas. La canterana Cristina Prieto iba a hacer todo lo posible para plantar cara a Jieni Shao, pero la enorme calidad y experiencia de la jugadora del conjunto galo, se iba a imponer con un claro 3-0.
Parecía que Thip nos iba a dar una enorme alegría, ya que la jugadora tailandesa comenzaba ganando con solvencia el primer juego, pero finalmente, Hana Matelova lograba dar la vuelta al marcador y ponía el 2-0 en el global con un 3-1 en el particular.
Fue sin duda, el punto clave, ya que de haber logrado el triunfo, el resultado final hubiera sido diferente, pero hay que reconocer que Matelova es infranqueable.
Desde ese instante, las cosas se iban a poner mejor. Roxana se las iba a ver ante Camelia Jacob, que empezaba venciendo 2-0 a la capitana linarense. A pesar de esto. Roxana logró empatar venciendo el tercer y cuarto juego.
En el definitivo quinto, que en Europa es a seis puntos y sin ventaja de dos, la jugadora linarense perdía 5-3, pero entonces sacó el carácter y logró remontar para anotarse el juego (5-6) y el punto por 2-3.
Con 2-1 en contra, Thip quería también demostrar que podía dar una alegría a una entidad. Tuvo que remontar y empatar el punto en el cuarto juego para llegar al decisivo quinto, donde se anotó la victoria sin aparentes complicaciones ante Jieni Shao. Era el 2-2 y el punto definitivo se lo iba a jugar Cristina Prieto.
Los técnicos habían decidido ir a por todas y pusieron a Roxana de número tres, conscientes de que para lograr el pase, había que ganar los dos partidos de la tailandesa y el de la de Rumanía, evitándoles un duelo ante Shao.
Llegar al quinto punto significaba quedar eliminadas independientemente de la victoria o la derrota. Cristina Prieto lo intentó, pero Matelova no dio opción a la jugadora de Linares y se llevó el 3-2 definitivo con un 3-0 particular.