Alejandro Copete // @Ale_Copete
Justo en esta semana, la UD Salamanca hubiera cumplido cien años de existencia. Ahora el fútbol en la ciudad castellano-leonesa se vive de manera diferente, con dos equipos con disputas entre ellos.
El que nos interesa, el Unionistas de Salamanca, se mantiene a raya con los puestos de descenso. A cuatro puntos de la quema, ocupan actualmente la decimotercera posición de la tabla con 27 puntos en su haber.
Aunque llevan tres partidos sin conocer la victoria, los de Raúl Casañ han echado el cerrojo y solamente han encajado un gol en las últimas cinco jornadas (lo que supuso su única derrota en dicho tramo, ante el Rayo Majadahonda lejos de casa).
Sin embargo, tienen un grave problema con el gol. Con 16 tantos son el segundo equipo del grupo que menos veces ha perforado las redes del rival.
Por ello, en un mercado de fichajes bastante movido para los charros (ocho bajas y siete llegadas), una de las llegadas más destacadas ha sido la del ariete venezolano Christian Santos. A sus 34 años es un trotamundos del fútbol con pasado en la Primera División con el Alavés.
Debido a la precaria economía salmantina (el propio presidente llegó a decir en una entrevista que en realidad son un equipo de Segunda Federación en ese sentido), muchas de las caras nuevas son cedidos: los centrocampistas Neskes (del Cartagena) y Unai Vega (Las Palmas), así como el central Nabil (cedido por el Rayo Majadahonda).
También para reforzar la defensa han llegado en este mercado invernal dos laterales, uno para cada banda: Fran Rodríguez (ex de la UD Logroñés con pasado en Segunda División) y Marcos Bravco (que empezó la presente campaña en el Hércules). Completa la terna de fichajes el mediocentro Mikel Carro, procedente del Valladolid Promesas.
Una hornada de futbolistas para paliar la salida de jugadores importantes, que llevaban muchos minutos y titularidades a sus espaldas. Y también el partido contra el Linares Deportivo significará la “revancha” de Mawi, ahora jugador minero.
En la portería sigue habiendo el debate entre Salva y el joven Alberto, mientras que el central Ramiro no pudo jugar por lesión en el empate contra el Córdoba. Aun así, en la zaga el líder es el lateral Jon Rojo.
En la medular están mandando Nespal y Óscar Sanz, quienes van a recibir como agua de mayo el regreso del pichichi (cuatro goles) Raúl Beinet tras cumplir sanción por ciclo de amarillas.
Y arriba el extremo Chapela espera ser el mejor socio posible tanto para el recién llegado Santos como para Carlos De la Nava, un ariete con movilidad y buenas maneras pero cuyo esfuerzo todavía no se ha visto recompensando con algún gol a favor.
Toda la parroquia charra que forma el CD Unionistas Salamanca esperan que las nuevas piezas encajen bien y el conjunto salmantino siga siendo un equipo que se vaya acostumbrando al bronce.