Tres partidos sin conocer la victoria, con dos derrotas consecutivas, han llevado nuevamente al Real Valladolid al filo del abismo. El equipo de Álvaro Aguado e Iván Sánchez ya sólo tiene un punto de colchón sobre los puestos de descenso.
Los de Pacheta se vieron superados de principio a fin ante el Celta de Vigo en la última jornada liguera. Un partido en el que sólo Iván Sánchez tuvo minutos sobre el césped de Balaídos.
Precisamente el de Campillo de Arenas fue uno de los elegidos para conformar el once inicial de los pucelanos. Arrancó desde banda izquierda y lo intentó con algún disparo para poner a prueba al guardameta local.
A igual que todo el equipo blanquivoleta, Sánchez se contagió de la falta de chispa de sus compañeros y pasó al costado derecho en la segunda mitad, siendo sustituido en el tramo final por Sergio León.
Quien no tuvo la oportunidad de participar en el encuentro fue Álvaro Aguado, que tuvo que conformarse con ver la derrota del Real Valladolid desde el banquillo.