Jaén Rugby llegaba a Santander cargado de ilusión por su victoria sobre Fénix Zaragoza y con las fuerzas justas para afrontar el cuarto partido consecutivo en el Grupo Élite.
Enfrente un rival, Mazabi Santander, que está construido para volver a División de Honor dos temporadas después de su descenso.
Los jiennenses rozaron la sorpresa dándole la vuelta al marcador y poniéndose por delante a falta de quince minutos para el final del partido. Un cuarto de hora eterno para los nuestros que se vieron superados en el último tramo del partido. El resultado final 27-17.
La primera parte fue muy trabada, con poco ritmo, lo que dificultó que Jaén Rugby desplegara su juego tan dinámico. Aún así, se impuso en sus primeros saques laterales y ganó en la primera melé. No obstante, sus escarceos iniciales en veintidós contraria fueron repelidos por la defensa de Mazabi Santander.
Tampoco los locales eran capaces de burlar la defensa jiennense para llevar el juego a campo contrario. Eso sí, una vez que lo logró, sumaron fase tras fase hasta llegar hasta la línea de ensayo rival (7-0).
Acortó distancias “Tato” Camacho gracias a la conversión de un golpe de castigo (7-3). Y es que Jaén Rugby siempre se mantuvo dentro del partido.
Los verdiblancos sumaron un segundo ensayo en esta primera parte en una jugada no exenta de fortuna, y es que el viento frenó un balón pateado “a la caja” que quedó en manos de su ala (12-3).
Los de Nicolás Sanfilippo estuvieron muy cerca de lograrlo, pero tanto “Peni” Tuitupou como Luis Alberto Enrique fueron cazados unos metros antes de posar. Así que el marcador ya no se movería.
El regreso de Jaén Rugby al campo tras el descanso fue espectacular. Le dieron la vuelta al marcador en 12 minutos de juego intenso y dinámico. Los jiennenses recibieron el balón sacado de centro y le imprimieron su sello.
Los terceras buscaron el contacto incrustados entre los tres cuartos y rasgaron con su dinamismo la defensa rival. Se perdía la cuenta de las fases encadenadas por el equipo jiennense y los golpes de castigo provocados cuando, a los 9 minutos de segunda parte, “Tato” Camacho consiguió junto a un poste el primero de los dos ensayos jiennenses, ensayo que él mismo transformó (12-10).
De nuevo tocaba recibir el balón. De nuevo tocaba construir. Los jiennenses resistieron la primera acometida de “los bisontes”, apodo del equipo cántabro, y volvieron a llevarlo a campo contrario gracias a una excelente patada defensiva.
Es difícil destacar individualidades en un equipo tan solidario. La jugada del segundo ensayo arranca con Nandi Pulido pescado en un ruck y provocando un golpe por retenido.
Después, el saque lateral ganado al límite por Joaquín Ramos, la brecha abierta por Manu González, los 60 metros en carrera avanzados por Juan Castro, su descarga y el último esfuerzo de Joaquín Berón que no anotó por centímetros, pero provocó el saque desde dentro de su zona de marca de Mazabi Santander.
Esa circunstancia facilitó la recuperación de balón por parte del equipo jiennense y la consecución de su segundo ensayo. De nuevo, Mesropian y Enrique rompieron la cortina, González y Camacho movieron de lado a lado el oval, Raya, Berón y Ramos percutieron cerca de palos, Tuitupou, Díaz y Cano protegieron los agrupamientos con los apoyos de Scaldaferri, los Castro y Pulido, pero el más listo fue Iván Tévez que lo recogió sobre la línea y lo posó tras ella entre una maraña de cuerpos acumulados entre las protecciones (12-17).
Y aquí es donde el cuento se vuelve pesadilla. Ni tres minutos después, el apertura local, Matías Jabase, bloqueó una patada de Camacho dentro de la veintidós jiennense y posó el balón antes de que llegara a la zona de balón muerto (17-17).
Un golpe muy duro y diez minutos por delante con las fuerzas al límite. Los santanderinos anotarían un ensayo más (24-17) y evitaron que Jaén Rugby sumaran el bonus defensivo transformado un golpe de castigo.
De ahí, hasta el final, resistencia y minutos para que los jugadores más jóvenes como Guillermo Sánchez, Pablo Pérez o los hermanos Javier y Gabri López sigan curtiéndose en esta categoría. El 27-17 final, como ocurriera en Zarautz, marca diferencias en el marcador, no tanto en la forma de competir.
Llegan ahora dos fines de semana sin partidos para Jaén Rugby. Tiempo para recuperarse de golpes, gripes y cansancio acumulado. También para que regresen algunos jugadores lesionados.
Eso será el domingo 9 de marzo en Las Lagunillas. El rival, RC Hospitalet que esta jornada ha recibido un severo castigo (41-0) en su partido contra Fénix Zaragoza.