Las lesiones están siendo un auténtico quebradero de cabeza para el Real Jaén en las últimas semanas. Y no será menos esta jornada de cara a su enfrentamiento ante el Atlético Malagueño.
«Hay por lo menos siete u ocho jugadores que llevan la semana cogida entre alfileres», explicaba Manolo Chumilla, confiando también en poder recuperar a algún futbolista de cara al domingo.
En esa lista nombres como Adri, Mario Martos, Urko Arroyo, Lara, Lolo Armario, Antonio López, Edu López o Pablo Siles. Pero el entrenador blanco no quiere caer en lamentaciones: «No hay excusas, sabemos que podemos tener alguna baja pero van a salir once que van a tener la confianza de todo el mundo».
Con la presión de sus perseguidores y el lastre de las lesiones «habrá que intentar hacer las cosas bien para que el equipo se sienta cómodo. Y si no están Lolo, Adri o Mario habrá que buscar alternativas. El plan lo tenemos, pero hay que esperar para intentar ver de qué jugadores disponemos».
Una de las claves del choque ante el Malagueño estará en la posibilidad de mantener la portería a cero. Chumilla ha enfatizado el buen trabajo defensivo de su equipo: «Es una garantía la gente de atrás, ya sean Espín o Jesús, e igual cuando ha tenido que salir Rodri o Sergio. Cualquiera de ellos puede jugar perfectamente. Los números defensivos del equipo son extraordinarios», subraya.
Sobre su rival, el técnico del Real Jaén destaca que se trata de «un filial y todos los años tiene movimiento pero siempre están ahí. Firman jugadores de calidad y suben jugadores con mucha proyección. Muchos jugadores están en la dinámica del primer equipo».
Y los blancos no estarán solos. Se prevé un numeroso grupo de seguidores lagartos en las gradas. Chumilla admite que «es importante sentir ese calor del aficionado fuera de casa. Espero que la gente que se pueda desplazar pueda disfrutar del partido y de una victoria del equipo».