Foto: Sevilla FC.
Alejandro Copete // @Ale_Copete
Si el primer equipo sevillista ha conseguido alejarse de la zona de descenso en el tramo final de la temporada tras una campaña irregular, su filial ha seguido el mismo camino. O incluso más épico si cabe.
El Sevilla Atlético parecía condenado a sufrir otro descenso seguido, pero de la mano de Antonio Hidalgo sacó el orgullo y ahora van como un cohete. Desde la jornada 23 solamente ha cosechado una derrota y con sus últimas cuatro victorias seguida ya ha dado un gran paso: los hispalenses no pueden caer en el ascenso directo.
Con sus 42 puntos y en undécima posición, le queda sin embargo algo que hacer. Un último paso. Depende de sí mismo para evitar el Play-Out. Una victoria en casa (ya han hecho llamamiento para llenar la Ciudad Deportiva Jesús Navas) les certificaría quedarse un año más en el Grupo IV de la Segunda RFEF. Con un empate o una derrota tendrían que tirar de transistor.
La remontada ha sido posible gracias a la capacidad de luchar por la victoria del Sevilla Atlético y también por haber sacado una fortaleza defensiva que los sevillistas no tenían a inicios de temporada. En los últimos 12 partidos solamente han encajado cinco goles en contra.
Y eso que Carmona y Kike Salas, dos defensas que alternaban primer equipo y filial, salieron cedidos en invierno. Al final han sido los Pablo Pérez, Diego Hormigo (ascendido desde el Sevilla C) y Scotta quienes han sabido cerrar la portería defendida por Flores.
En el centro del campo han cogido galones Lulo y Sintes, mientras que el exótico luxemburgués Johansson ha dado un paso adelante tras las lesiones de los dos fichajes invernales, que venían ambos para reforzar el centro del campo.
Adri Dominguez (ex del Antequera) y Joao Daniel (ex del Sporting B) no han podido jugar mucho con la elástica de la franja roja, ya que cayeron pronto lesionados de gravedad. Por ello el Sevilla Atlético ha tirado mucho de sus escalafones inferiores, ejemplificados en las figuras de Alexandro y Bueno; algo que se le achacaba que no hacía el Sevilla FC con su filial hasta que la situación en la entidad hispalense se ha resuelto.
Aunque no es un equipo excesivamente goleador (33), en el ataque ha destacado Isaac Romero (con ocho goles) y Capitas. Aunque no ha marcado muchos tantos, Carlos Álvarez ha demostrado porque está a medio camino entre la Ciudad Deportiva y el Sánchez-Pizjuán.
Con este duelo en tierras hispalenses, el Atlético Mancha Real se despedirá de manera oficial de la Segunda RFEF y afrontará su nuevo destino en la Tercera RFEF. Es el momento de reflexionar, pero antes tendrá un partido contra un equipo que seguramente no quiera dejar su futuro más inmediato en manos del azaroso destino.
