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Nada mejor que una derrota sonora en la Champions para que el Real Madrid empiece a agitar el mercado. Reconozcamos que a Florentino le gusta eso de tapar los fracasos con un par de fichajes de los que congregan a miles de personas en su presentación, por lo que hay que empezar a preguntarse desde ya cómo va a ser el verano por la capital del España.
Se busca delantero
Benzema está ya mirando los planes de jubilación después de una carrera excelente. No hablamos de más delanteros en la nómina blanca porque, directamente, es que no hay nadie. Bueno sí, Mariano. Sin embargo, este lleva años siendo un invitado de lujo a los partidos del Madrid y nadie que vive la experiencia de las apuestas online confía en el canterano blanco.
El Madrid tiene ya fichado al joven Endrick. Ahora bien, echarle el peso del equipo al brasileño no parece la mejor idea del mundo por ahora, y es que el chaval va a necesitar un tiempo de adaptación y aún tiene que terminar de formarse.
Entonces, ¿quién puede ocupar la delantera blanca? Siempre está ahí el nombre de Mbappé. Ahora bien, este año tiene contrato con el PSG y habría que negociar con los dueños cataríes. Además, no hay que olvidarlo, el crack de Bondy es más un jugador que arranca desde la banda como hace, precisamente, un Vinicius que es la estrella blanca en la actualidad.
Problemas en el medio
Pero si el delantero es urgente, echar la vista a la medular blanca tampoco invita al optimismo. Kroos y Modric, que puede que se queden una temporada más, no están ya para grandes gestas. Y es más que normal, ya que acumulan muchas temporadas en sus piernas.
Parece que los blancos están decididos a recuperar a Brahim de su estancia en Milán y que Ceballos tendrá un papel más destacado junto a los Camavinga y Tchouameni. Sin embargo, ninguno de los cuatro parece que estén a la altura de los mejores centrocampistas del mundo. El Real Madrid tiene entre ceja y ceja al inglés Bellingham. No obstante, el Dortmund ya ha anunciado que el que quiera al joven interior tendrá que rascarse el bolsillo y llegar a cifras que van a superar en mucho los 100 millones de euros.
Un último nombre que ha aparecido en el horizonte blanco es el de Kimmich. El del Bayern parece que quiere salir de Múnich, pero de ahí a que aterrice en el Bernabéu media un abismo. Y lo mismo sucede con un Bernardo Silva que ha sido su ejecutor en Champions y que ya ha sonado en varias ocasiones como posible refuerzo tanto de los blancos como de su eterno rival, el Barça.
Lo mejor de todo esto es que nos espera un verano de lo más animado siguiendo los fichajes del Madrid desde la orilla de la playa o en la piscina, una estampa que siempre ha sido tradicional en la temporada estival.