La Selección Española sub-21 llegaba al Estadio de la Victoria de Jaén con buenas sensaciones tras la goleada a Malta en el primer partido de clasificación para el Europeo. Esta vez, tenían delante a un rival que les iba a poner las cosas más difíciles, pero contaban con el inestimable aliente de una afición jiennense que llenó las gradas.
Escocia, que debutaba en esta ronda tras descansar en la primera jornada, tenía claro el plan: juntarse atrás y esperar la oportunidad para salir a la contra. Entre las novedades del once español, Santi Denia hacía debutar de inicio a Hugo Bueno y Omorodion.
Durante la primera mitad escasearon las ocasiones en ambos bandos. Solo una ocasión de los escoceses hizo peligrar la portería española, pero Cuñat desviaba sin demasiadas complicaciones un disparo casi sin ángulo de Doak, el futbolista más activo durante la primera parte.
España buscaba grietas entre la zaga rival, pero se veía obligada a disparar desde lejos debido a la acumulación de defensas en el área. Francés, capitán en este duelo, probaba suerte desde lejos pero no tenía éxito de cara a puerta.
Tocaba coger aire y hacer ajustes de cara a la segunda parte para intentar encontrar el gol. Hugo Novoa y Pablo Torre entraban por Arnau Martínez y Javi Guerra. Subía una marcha España y comenzaban a llegar las ocasiones.
La primera era de Akomach, que recibía un centro en el segundo palo que mandaba por encima de la meta de Slicker. A continuación, el disparo de Pablo Torre desde la frontal se topaba con el palo y dos minutos más tarde, una falta botada por el centrocampista del Barça chocaba contra un jugador de la barrera y no cogía puerta.
El gol se resistía a pesar de que el combinado nacional lo intentaba desde todas las posiciones. Hugo Novoa, desde el costado derecho, veía cómo su intento caía en picado y se estrellaba contra el travesaño.
El tanto se respiraba en el ambiente pero no llegaba, ni si quiera en una gran jugada en la que Illias Akomach entraba en el área aprovechando un gran pase de Barrios.
Pero como dice el refrán: “Tanto va el cántaro a la fuente, que al final se rompe”. Quedaban menos de diez minutos para el final y Pablo Torre centraba desde la esquina. El balón iba directo a la cabeza de Turrientes, que entraba al remate con potencia para perforar la red.
El jugador de la Real Sociedad ya le marcó a Malta, aunque seguro que este gol le dejará mejor sabor de boca sabiendo que desatascó un partido para dar la segunda victoria (de dos) a sus compañeros. El equipo de Santi Denia lidera ahora su clasificación con siete goles a favor y ninguno en contra.
Colas de 50 minutos para comprar agua en el único puesto del fondo norte.