Alejandro Copete // @Ale_Copete
La lógica imperaba que el Real Madrid Castilla iba a sufrir la pérdida de una generación de oro que ahora pulula por la élite, y finalmente así ha sido. Por lo menos en la primera vuelta del Grupo II de la Primera RFEF, donde el filial blanco ha cuajado un paso irregular hasta el momento.
Los madridistas se encuentran en un momento de reestructuración con la plantilla con la media de edad más baja (19,9 años) de toda la tabla y con un primer equipo que pese a las lesiones no suele contar con la cantera (Carrillo, Vinicius Tobias, Álvaro Rodríguez, Mario Martín y Gonzalo han debutado pero no han llegado ni a los 100 minutos con el Real Madrid)
También cuentan con un entrenador, Raúl González Blanco, en una posición indeterminada de cara al futuro. Los rumores de su marcha a equipos de Primera División no se concretaron, Ancelotti ha renovado y en el Juvenil Arbeloa aprieta fuerte.
El objetivo de pelear por ascender a Segunda División se aleja para el Real Madrid Castilla hasta los nueve puntos, mientras que a diez es la distancia con el descenso. Tierra de nadie para un conjunto que tiene 27 puntos y que es el rey del empate con nueve igualadas en el marcador.
El último partido para los de Raúl González supuso la primera derrota en seis encuentros (ante el Atlético Sanluqueño, un rival directo para el Linares Deportivo en su pelea por no bajar), pero es que en todos esos partidos solamente pudo sumar una victoria. Afrontan ahora un duelo en casa donde no conocen la victoria desde el 3 de diciembre del año pasado.
De momento el único refuerzo invernal para los blancos ha sido la promesa del Castellón Jeremy de León, que pese a su corta edad ya acumula bastantes minutos en la Primera RFEF y fue tentado por equipos de la élite. Pero el puertorriqueño eligió finalmente ‘La Factoría’ para intentar dotar de dinamismo a un ataque formado por Álvaro Rodríguez (cinco goles), Gonzalo (cuatro tantos) y Peter.
En el centro del campo la figura es sin duda alguna Nico Paz, el único de los canteranos con cierta regularidad en el primer equipo y el llamado a ser una pieza importante para los años venideros de la entidad blanca. Manuel Ángel y Palacios, quienes el año pasado estaban en el Juvenil, se han acoplado bien a la medular del Real Madrid Castilla.
Theo Zidane y Lucas Cañizares, desde el mediocentro y la portería, buscan honrar sus apellidos llenos de gloria futbolística. Eso ya no lo hará esta temporada con la camiseta blanca Julen Jon Guerrero, cedido al Alavés B.
Mientras que en la defensa, Edgar (baja por sanción aunque los madridistas han recurrido la tarjeta) Obrador y Vinicius Tobias siguen destacando con la irrupción del central Asencio, que se ha afianzado en el centro de la zaga. Por su parte, Marvel sigue recuperándose de su lesión.
El filial madridista busca una de las clásicas remontadas que parece ser que el primer equipo siempre ha estado ligadas a lo largo de su historia y palmarés, en este caso para regresar a una plata que no cata desde la temporada 2013/2014 y que el pasado año se les escapó en el último suspiro.