Volvió a ganar el Linares Deportivo imponiéndose con merecimiento al Atlético Baleares. Un triunfo «importante para volver a la dinámica y que nos mete de lleno de nuevo en la dinámica, en el nivel de confianza y el ritmo que teníamos», destacaba el técnico azulillo.
Alberto González resaltó que su equipo fue capaz de «tener el control, ocasiones y trabajar muy bien desde el principio. Estoy muy contento con el trabajo que ha desarrollado el equipo».
Su triple cambio en la segunda mitad fue providencial para anotar el segundo gol: «A veces pasa al revés. Fue la situación idílica, meter tres de refresco y ponerte con dos de ventaja», subrayó González.
Uno de los hombres destacados fue el recién llegado Adán Gurdiel, que debutó con la azulilla y marcando gol. Al respecto, el entrenador malagueño afirmaba que «el hecho de debutar con gol, con victoria, en casa, cualquiera firmaría entrar así en un club. Le ha costado entrar pero mejor irlos cogiendo con buenas sensaciones».
Los cambios en el once y las posteriores sustituciones durante el partido dejaron ver a un equipo linarense muy competitivo, que pese al cambio de futbolistas no bajó su nivel competitivo y demostró la polivalencia de sus jugadores.
«Me gusta que tengamos alternativas, que reduciendo la plantilla mantengamos esas posibilidades. Tener muchos jugadores a buen nivel, nunca será un problema», explicaba Alberto González.
Una de las claves del encuentro estuvo en el buen hacer del Linares Deportivo para minimizar errores en defensa. «Nuestra idea es no intentar cometerlos, más contra un equipo con tanta pegada. Si no saltas la línea de presión, este tipo de equipos te matan».