Jugadores nuevos, equipo técnico nuevo, hasta campo nuevo. Muchos retos son los que ha afrontado Jaén Rugby en lo deportivo esta temporada 2021/22 recién terminada.
Es momento de analizarla y de dar los primeros pasos hacia la próxima campaña. Lo hacemos con Nicolás Sanfilippo, entrenador que ha dirigido a los dos equipos senior masculino, uno en División de Honor B y otro en 1ª Territorial Andaluza.
“En lo global –asegura Sanfilippo- podemos estar contentos, pero no satisfechos. Lo hemos dado todo, pero hay aspectos más allá del juego y la clasificación que debemos mejorar para seguir creciendo”.
Dicho esto, de los 36 equipos que forman los tres grupos de la categoría, Jaén Rugby ha sido el noveno teniendo en cuenta el número de ensayos, muy por encima de equipos que han disputado la segunda fase de la Liga en el Grupo Élite.
Jaén Rugby ha cumplido su cuarta temporada consecutiva en DHB y la próxima será la quinta, todo un hito para la historia del club. Quintos en la temporada del ascenso, campeones en la 19/20 y luego llegarían las dos temporadas post-pandemia y el cambio en el modelo de competición: quintos en la 20/21 y cuartos en la 21/22. La liga en dos fases, la primera muy corta, perjudica a equipos como Jaén Rugby que se reinventa cada temporada.
Nicolás Sanfilippo no quiere que suene a excusa: “La obligación de un entrenador es sacar el máximo partido a la plantilla y para eso hay que conocerse bien, ellos a los técnicos y nosotros a ellos. Es una cuestión de tiempo”.
Tanto Sanfilippo como el segundo técnico, Andrés Rabinovich, han ido forjando un estilo de juego directo y rápido que ha podido verse, sobre todo en la segunda vuelta.
“No entramos en el grupo élite por tres puntos. Nuestros rivales directos estaban más acoplados, pero aun así, perdimos por resultados muy ajustados”.
Otro detalle a tener en cuenta es que, de los tres rivales del Grupo C que se clasificaron para pelear por el ascenso, UR Almería ha quedado sexto, AD I. Industriales ha jugado las semifinales y Pozuelo R.U. está a punto de certificar el ascenso a División de Honor.
Sin duda, ha sido en la segunda vuelta donde el equipo ha demostrado todas sus virtudes. Un grupo humano muy unido, un juego muy frontal, yendo rápido arriba y una resistencia física importante.
“No te olvides del orgullo -remarca Sanfilippo-, del amor propio y al juego. En la segunda vuelta todos los rivales llegaban muy motivados a los partidos, no bajamos los brazos ante ninguno, nos sobrepusimos a todo y ahí quedó reflejado el trabajo. Nos mantuvimos en la primera posición mientras otros equipos iban perdiendo fuelle”.
Ahora se trabaja por mantener el tono físico. Por este motivo se han planificado entrenamientos durante estas semanas previas a las vacaciones.
“El trabajo físico, en el gimnasio y sobre el césped, es fundamental y lo vamos a potenciar con vistas a la temporada que viene, tanto en DHB como en Liga Andaluza”. Cezar Ciobanu se ha hecho cargo de esa parcela esta temporada.
Ya que repasamos nombres propios, pongamos sobre la mesa el de algunos jugadores destacados. El medio melé Estanislao Bay ha sido un jugador determinante por su dirección de juego y sus 22 ensayos, líder de la categoría.
También ha jugado un papel importante en la faceta anotadora su compañero en la bisagra, Rafael Migale, que ha sumado 176 puntos con el pie. Junto a ellos, dos jóvenes de la cantera, Fran Víbora y Juan Navarrete, que han superado el 90% de los minutos jugados.
Ambos son los jugadores que más tiempo han permanecido sobre el terreno de juego. Tras ellos, el centro Argentino Luis Alberto Enrique y el capitán, Emiliano Gómez, que han sumado 10 y 8 ensayos respectivamente.
No nos podemos olvidar en este balance, de la irrupción de una nueva saga de jugadores procedentes de la cantera de Jaén Rugby: los hermanos Gabriel y Javier López, que han debutado este año en División de Honor B.
Objetivo conseguido en Primera Andaluza
El equipo senior de Liga Andaluza ha cumplido con creces dos de los objetivos marcados tras el ascenso a la nueva categoría: mantenerse y aportar jugadores al primer equipo cuando así fuera necesario.
Jaén Rugby se ha ganado el derecho a jugar un año más en la máxima categoría del rugby andaluz. Han terminado quintos, dejando atrás a equipos mucho más experimentados en esta liga. Para los técnicos, el margen de crecimiento de los jugadores de este equipo es alto si mantienen su nivel de compromiso.
“Prácticamente la mitad de los jugadores han sido seniors de primer año, es decir, sub-20 y han notado mucho el salto de categoría, pero han aguantado muy bien el ritmo y asimilado la nueva propuesta de juego”.
El año que viene la plantilla se verá reforzada con la nueva hornada de jugadores procedente del equipo sub 18. De nuevo habrá que acoplar experiencia y juventud para lograr la temporada que viene el crecimiento del grupo y la consolidación del equipo en la categoría.
El cuerpo técnico, que este año han formado Nicolás Sanfilippo, Andrés Rabinovich, Lorenzo Mollinedo y Cezar Ciobanu, ya trabaja junto a la directiva en la planificación deportiva para la temporada 2022/23, temporada en la que el club podría alcanzar las 260 fichas de competición. A ellas hay que sumarles las de la Escuela y la Academia Kubota Jaén Rugby que este curso han superado el centenar.