Motivos personales han llevado a que Alberto González tenga que teletrabajar en semanas alternas para poder seguir dirigiendo al Linares Deportivo.
Una situación que el propio técnico, acompañado del presidente del Linares, Jesús Medina, ha explicado en rueda de prensa: «Estoy en un proceso de separación, unido a la distancia hacia mi familia y a las obligaciones laborales, están dificultando mi relación con mis hijas. Viendo estas dificultades entendí que tenía que tomar medidas que me permitiera un acercamiento y mantener la relación que siempre he tenido».
González argumentaba que «a principios de diciembre le comuniqué al club que tenía que dejarlo porque la prioridad para mí son mis hijas. La repuesta inmediata de la directiva fue fantástica, de entender mi situación. Me hicieron un planteamiento que no me había pasado por la cabeza, por que es algo inédito en el fútbol. Me plantearon poder buscar la fórmula para compaginar mis necesidades familiares y continuar con el proyecto. Y así se planteó la opción de teletrabajar en semanas alternas, aunque eso implique que las semanas que no esté no pueda estar incluso en los partidos».
A nivel deportivo, el entrenador azulillo ha hecho balance de la primera vuelta de su equipo: «El inicio fue difícil desde la pretemporada. Aún así empezamos por encima de las expectativas en cuanto a resultados. Encontramos rápidamente ese punto de equilibrio que te permite competir bien. Luego la competición te va poniendo en tu sitio y hemos entrado en una etapa de resultados menos buenos. El equipo ha tenido una evolución y un crecimiento y confiamos en hacer un buen papel en esta segunda vuelta», comentaba González.
De cara al encuentro de esta jornada ante el Celta de Vigo B, el técnico malagueño define a su rival como «un equipo con jugadores que te hacen pagar los errores mucho más caros. En este nivel, los filiales están muy cerca del primer equipo. Con espacios hacen mucho daño, debemos evitar errores en las zonas menos determinantes».
Respecto a la nueva situación de Alberto González al frente del equipo azulillo, Jesús Medina señalaba que ante «situaciones así que generan algo de controversia es un acicate para que todos demos el 200%. El Linares Deportivo es una familia y entendemos que una parte de nuestra familia necesita nuestro apoyo».