La Federación Andaluza de Bolos (FAB) ha participado presentado las dos modalidades de bolos serranos integradas en la entidad, las modalidades valle y montaña de bolo andaluz. El evento ha constado de dos partes. En primer lugar, ha tenido lugar un Simposio Internacional con el título “Presente y Futuro de los Juegos Tradicionales: Modelo cultural vs Modelo deportivo”, en el que han participado cerca de 70 especialistas europeos en deportes tradicionales procedentes de 9 países europeos (Portugal, Francia, Bélgica, Italia, Hungría, Croacia, Serbia, Macedonia y, por supuesto, España). De forma paralela, también se ha celebrado el Festival Internacional de Juegos Tradicionales, donde 37 delegaciones procedentes de los anteriores países, han presentado sus disciplinas autóctonas.
Los bolos serranos han estado en este evento. Y con una de las mayores delegaciones del Encuentro: quince adultos y tres niños han atravesado la Península para exponer al Mundo una de nuestras señas de identidad cultural. Primero en el Simposio, donde José Miguel Nieto Ojeda, presidente de la FAB, intervino defendiendo el modelo que impera en la entidad. Y más tarde en el Festival, donde la bolera serrana, que se montó en uno de los espacios del Complejo Deportivo “Ruth Beitia”, estuvo muy concurrida durante todo el tiempo.
Los dos modelos que se debatían en el Simposio fueron defendidos por el doctor Ulises Castro, de la Universidad de las Palmas de Gran Canaria, y Antonio Barreñada, de la Universidad de León. Presentaron ponencias la canaria Yurena Pérez (salto del pastor canario), el francés Guy Jaouen (luchas célticas), el italiano Ángelo di Pietro (juego il maiorchino), el húngaro Itsván Burai (juegos tradicionales húngaros) y el cántabro Roberto Cabiedes, profesor del Universidad Europea del Atlántico que habló de bolos. En el debate final, Nieto expuso que la fórmula empleada por la FAB ha dado buenos resultados, complementando la parte cultural con la deportiva del juego, “que estar integrado en el sistema federativo es un medio más, una herramienta para la salvaguarda de los juegos de bolos andaluces, nunca un fin. El fin siempre será la protección y conservación de estas manifestaciones culturales. Estar integrado en el sistema federativo ha supuesto aumentar la financiación, la visibilidad y la inclusión de mujeres y niños en un juego que siempre ha sido practicado por hombres adultos”. Castro y Barreñada recapitularon lo dicho en todas las intervenciones, concluyendo que ambos modelos pueden y deben ser complementarios, pues cualquier herramienta suma a la hora de salvaguardar nuestro patrimonio etnológico.
En el Festival se mostraron casi cuarenta grupos de juegos tradicionales, tanto infantiles como para adultos. Más de 170 monitores atendieron los espacios donde se desarrollaban cada uno de los juegos, todo dentro del complejo deportivo santanderino. Una decena de juegos de bolos, tanto franceses como españoles procedentes de Cantabria, Asturias, Cataluña, Galicia, Valencia y Andalucía. También hubo exhibiciones de lucha con garrote canario, de lucha celta y canaria,de levantamiento de piedra o de barra aragonesa y palet bretón (lanzamiento), entre otros. Hay que destacar la buena convivencia que se ha visto entre las distintas delegaciones. Mención aparte el feeling entre las dos delegaciones más numerosas del evento, la del salto canario, una curiosa y espectacular forma en que los isleños se desplazan por la montaña y los riscos utilizando una pértiga, cuyo origen es prehispánico, y la de los bolos serranos andaluces, que compartieron tradiciones y risas. También hubo muy buena sintonía con las de las modalidades cántabras de bolos, especialmente con la del “pasabolo tablón”, nuestro deporte hermano, pendiente de un gran encuentro entre ambas especialidades. Prueba de ello es que, en un pequeño concurso que organizaron los andaluces para repartir unas gorras promocionales, ganó el legendario jugador de pasabolo tablón Michel del Río, varias veces campeón de España de la modalidad. Por lo visto en la bolera serrana, Michel también podría estar también entre los primeros de bolo andaluz, pues en una de sus tiradas lanzó el mingo a una distancia al alcance solo de los jugadores más avanzados de la especialidad andaluza.
Ya hay fecha y lugar para el “Juega Europa 2025”, en los que la FAB tiene proyectado participar. Será el primer fin de semana de julio del año que viene en Reus, Tarragona.