En un duelo que prometía la máxima emoción, la final del Campeonato de Andalucía de selecciones provinciales masculinas de bolo andaluz entre Córdoba y Jaén, la séptima en la historia del torneo entre ambas selecciones, se resolvió con un claro e inesperado dominio del equipo jiennense. Jaén se impuso por 2-0, con doble 6-1 en cada punta, en un encuentro disputado en la Bolera Municipal ‘Modesto Fernández Mendoza’, en El Calonge, pedanía de Palma del Río.
Hasta la fecha, de las seis finales anteriores, Córdoba había logrado imponerse en 2 ocasiones, mientras que Jaén ostentaba 4 victorias. Sin embargo, el encuentro de ayer no tuvo la igualdad que se esperaba.
Jaén, a pesar de la baja de última hora de Paco Espinosa, que redujo su equipo a cinco jugadores, pasó por encima de Córdoba con un contundente 2-0, con doble 6-1 en cada punta. El equipo de Jaén estuvo formado por Antonio Castillo (capitán), Salva Sánchez, José Miguel Nieto, Javi Navarro y Paco Aibar.
Córdoba, por su parte, contó con el actual campeón de España de la especialidad, Tete López (capitán), Fran López, Ulises Amaya, Manuel ‘Poki’ Gilabert, Pablo Rodríguez y David Puerta.
El encuentro fue arbitrado por el juez nacional Juan Antonio Calvo, auxiliado por Mari Carmen Trujillo en la mesa y Virtudez Ruiz en la zona de rayas.
Tras la inesperada derrota, Tete López declaró que las intensas lluvias caídas en la zona de Córdoba durante los últimos dos meses habían dificultado enormemente los entrenamientos de su equipo, añadiendo que la suerte tampoco estuvo de su lado en momentos clave del partido.
En contraste, Antonio Castillo, capitán de Jaén, manifestó que en los bolos, el factor decisivo es quién logra entrar en juego con mayor eficacia en el momento preciso, y que en esta ocasión, ese factor estuvo claramente del lado de su equipo.
Es relevante destacar la fuerte tradición de bolo andaluz en El Calonge, donde se juega a los bolos serranos de Jaén desde la llegada de los primeros colonos procedentes del pueblo de Bujaraíza, Sierra de Segura, en enero de 1950. La pasión por este deporte se respira en cada rincón de la localidad, como lo demuestra el original panel de bienvenida a la entrada del pueblo, donde el nombre «Calonge» se forma utilizando dos bolos para la “L» y una bola para la “O».
