Alejandro Copete // @Ale_Copete
Hoy el Real Jaén disputa el Trofeo del Olivo contra el Granada CF. Un equipo, el nazarí, que a base de tesón y los contactos con los Pozzo ha conseguido de momento echar pequeñas raíces en la Primera División de nuestro fútbol. Siendo un partido amistoso, lo que esperamos es que ambos clubes y la afición lagarta disfrute de un buen espectáculo futbolístico. Pero obviamente, el Real Jaén siempre querrá seguir sumando éxitos en su Trofeo.
Este año se celebra la trigésimo cuarta edición, desde que en el año 1981 un gol del mítico Cardeñosa le daba la victoria al Real Betis frente al equipo anfitrión. Pero existe una fecha anterior a ese partido donde ya se disputó un torneo similar y que también recibió el nombre de Trofeo del Olivo. ¿Qué tiene de especial esa edición?
En la temporada 66/67 entrenaba al equipo José Millán González y dirigía los designios de la entidad lagarta en los despachos Antonio Horna, que entre otras cosas, al parecer fue el que proyectó la instalación del alumbrado en el Estadio de La Victoria. Sin embargo no acabó la temporada como presidente, dimitiendo en diciembre del año 1966. Pero otro de sus planes perviviría: la celebración del primer Trofeo del Olivo. Para la ocasión se eligieron 3 equipos que se enfrentarían al Real Jaén en el torneo: el inglés Queens Park Rangers, el italiano AS Roma con la presencia del jugador nacional Joaquín Peiró; y el CD Málaga, matriz del equipo que conocemos hoy en día como Málaga CF y que por entonces disputaba también la Primera División de nuestro fútbol.
Se eligieron como fechas para disputarse el torneo el 10 y 11 de junio de año 1967, con la ciudad jiennense en plenas fiestas de la Virgen de la Capilla. Entre los actos programados se encontraba la disputa del torneo, por lo que la organización pensaba que el ambiente festivo contagiaría a todos los asistentes a La Victoria y el atractivo de los equipos internacionales conseguirían que tanto en Andalucía como en el resto de España se hablara del Real Jaén.
Pero según nos cuenta nuestro compañero José Eugenio Lara de ‘Mi Real Jaén’, la organización del Trofeo tuvo un gran problema: el Real Jaén disputaba contra el Eibar una eliminatoria de ascenso de Tercera a Segunda División. Así que para el sábado 10 de junio se formó un combinado de jugadores “cedidos” para la ocasión de equipos como el Sevilla FC, el Atlético de Madrid y Real Valladolid, entre otros; que debían enfrentarse al Queens Park Rangers, que venía de conquistar la que hoy conocemos como Capital One Cup (La Copa de la Liga inglesa), siendo este su único título copero hasta el momento y con el mérito de haberse coronado como campeón siendo equipo de Tercera División inglesa.
El resultado de esa semifinal fue 1-0 para los jiennenses, Por otro lado, la Roma ganaba al CD Málaga por dos goles a uno, siendo el malogrado Pedro Berruezo el autor del gol malaguista. En la final, el combinado local debía enfrentarse al equipo italiano, un equipo con más empaque que el londinense y uno de los históricos del Calcio. No era tarea fácil.
Pero antes, la típica final de consolación para los equipos perdedores, donde el club andaluz demostró porque era de una categoría mayor endosando un 6-1 al club inglés. Llegaba el momento de ver quien se llevaba la primera edición: el equipo formado por jugadores de otros equipos pero que defendían por un fin de semana la casaca blanca del Real Jaén o un equipo experimentado que sabía lo que era ganar títulos en su país y en Europa, ya que a principios de la década de los 60 fue campeón de la Copa de Ferias.
Gracias a nuestro compañero José Carlos Teruel ‘Charly’ hemos podido saber que del once tipo del club de la capital italiana campeona en el año 67 repitieron exactamente 6 jugadores en la final contra el Real Jaén; por lo que presentaron un equipo muy competitivo. Pero al final el gato al agua se lo llevó el Real Jaén venciendo por 2-0 con goles de Ortega y Celestino, proclamándose así campeón de su torneo el Real Jaén.
Este primigenio Trofeo del Olivo no tuvo continuidad y no fue hasta el mencionado año 81 cuando de nuevo en los veranos de la capital de la provincia venía una fecha marcada en rojo en el calendario veraniego, el día en que mayores y pequeños podrían disfrutar de su equipo de los amores con todas las caras nuevos y con las ilusiones renovadas para la temporada que se avecinaba. Este año ha tardado un poco, pero ya esta aquí el Trofeo del Olivo.