Alejandro Copete // @Ale_Copete
Seis años después el Mérida A.D., último nombre de una lista de vaivenes y defunciones institucionales, vuelve a la categoría de bronce anhelando lo que su Imperio llegó a conquistar: nada más y nada menos que las glorias de la Primera División. Lo consiguieron con otro nombre, con otros emperadores. Pero lo que nunca ha cambiado es el pueblo que sigue visitando su anfiteatro local en busca de alegrías, ahora simplemente llamado “Romano”. Unos habitantes que presumen orgullosos de su legado histórico que empezó como una colonia para soldados jubilados, o eméritos. Ordenada la construcción de dicho poblado por el emperador Augusto, de ahí el nombre antiguo de la ciudad: Emérita Augusta.
Tras arrasar en la Tercera extremeña, el míster Ángel Alcázar (ex futbolista del Rayo Vallcano, entre otros) tiene clara una cosa: esto es una categoría superior y aquí se viene a sufrir. El planteamiento inicial del equipo blanquinegro es el de un equipo con mucha seriedad atrás gracias sobre todo al trabajo de Chino convirtiéndose casi en un tercer central y aprovechar la velocidad de jugadores como Joaqui para matar a la contra. De momento ningún gol encajado y siete puntos de nueve que le ponen provisionalmente en todo lo alto de la tabla pero mostrando también una paupérrima estadística de goles a favor (dos). La línea medular es quizás la parte más fuerte del Mérida A.D, con mucha competencia entre ellos y recursos para todo tipo de juego en el césped; con el ejemplo del mediapunta Borja, el jugador más en forma del equipo y que puede actuar en el centro y por la banda.
Mucho ha dado de hablar este inicio y pese a haber comenzado con buen pie, todo sigue pasando por seguir un año más en Segunda B para seguir creciendo. La planificación ha sido la de sumar jugadores con minutos en la categoría al bloque del año pasado y alguna promesa, como Elton Martins o Godoy, este último con buenas actuaciones pese a su edad. Por otro lado, un hecho que parecía como una anécdota (afortunadamente así lo ha sido) puede afectar en la parcela deportiva. El accidente del autobús del club dejó un susto y varios jugadores importantes con collarines y brazos escayolados como Pedro Conde o Alejandro Zamora, que fueron fichados para aportar experiencia en la Segunda B. Sin embargo, parece que al final llegarán al choque contra el Jaén sin secuelas. También es probable la reaparición en la delantera del veteranísimo Jesús Perera, con números en la máxima categoría. Otro fichaje de calidad ha sido Raúl Moreno, portero titular el año pasado en La Hoya Lorca. La baja sensible de Morgado por doble amarilla en la victoria extremeña ante el UCAM puede pesar en la imbatilidad del equipo.
Con la idea de seguir sumando para conseguir el objetivo de la temporada los aficionados vuelven al estadio para ver a sus gladiadores pelear por los tres puntos. En casa han empatado en liga ante el Jumilla y han sido derrotados en la Copa, por lo que en Mérida urge convertir su campo en una fortaleza. Hasta ahora, los pulgares señalan hacia arriba.