Alejandro Copete // @Ale_Copete
En Lepe tenían asumido que este año iba a ser complicado, lo lógico es que pienses de esa manera cuando de la temporada anterior solo siguen dos jugadores y has tenido que completar plantilla con uno de los presupuestos más humildes de la categoría. Para colmo, el entrenador también debutaba con jugadores seniors. Sin embargo, de momento el fútbol nos está demostrando que es un deporte que cuando quiere se salta a la torera las leyes de la física. El C.D San Roque se encuentra actualmente en una posición cómoda para sus intereses con 20 puntos, a 6 del descenso y con mucho trabajo realizado para conseguir la permanencia si se mantiene en la línea que está demostrando cada fin de semana: un conjunto aguerrido que compite los 90 minutos y que lleva el gol por bandera.
El equipo onubense es el equipo más goleador del grupo IV y tiene en sus filas al pichichi Chaco, una de las múltiples caras nuevas este año. El delantero alicantino con experiencia en otros grupos del bronce y en el Arroyo está batiendo sus mejores registros goleadores de toda su carrera. Viene de marcar dos dobletes consecutivos y debe ser el hombre a vigilar el sábado. Pero es que los extremos llevan 7 goles entre los dos. Solamente en un partido los leperos no consiguieron ver puerta, contra el Linares. Unos números que serían arrolladores si no fuera por el número también elevado de goles encajados, porque han mantenido su puerta a cero únicamente en 3 jornadas. Pero no parece preocupar esta poca coordinación entre ataque y defensa en los planes de Juanito, exjugador internacional, ya que por lo menos suman. Con 11 empates, los aurinegros son el rey de la tabla en ese aspecto. No ganaban, pero tampoco perdían.
Y digo ganaban porque el San Roque lleva dos victorias consecutivas en casa a expensas del próximo partido contra un reforzado Real Jaén por la goleada al Melilla que han acallado voces que señalaban a la ineficacia ofensiva. Y más todavía con las bajas seguras por sanción de los centrales titulares: Baquero (34 años, la experiencia de la plantilla) y Bonaque. En su casa, los onubenses buscan empezar a sumar mediante la llamada media inglesa y volver a conectar rachas de imbatilidad (la última fue hasta 7 partidos sin conocer la derrota). No fue fácil la labor este verano de la Secretaría Técnica a la hora de buscar jugadores y se apostaron por muchos jugadores que vienen de Tercera División y con poca experiencia en Segunda B. También se notó el pasado bético del míster (segundo entrenador del filial y entrenador de infantiles) con las llegadas procedentes de Sevilla: Isuardi, la cesión del extremo Luis Lara y Lolo, que se ha convertido en un fijo en la medular. Otro fichaje de calidad ha sido Nico Cháfer, que aporta mucho en el juego de estrategia a balón parado y se han conseguido muchos goles de esta manera.
Desde el primer momento no han engañado a nadie en Lepe: primero la permanencia para seguir sumando en Segunda B (9 temporadas). Después de eso, lo que quiera el fútbol que venga. No hay cuentas de la lechera en la provincia de Huelva que tiene el “honor” de disfrutar de un derbi provincial. El CD San Roque quiere que su nombre resuene en la categoría poco a poco, año a año, paso a paso, punto a punto.