Alejandro Copete // @Ale_Copete
Los granadinos comienzan a despertar de un inicio de temporada que ha sido una pesadilla para ellos. El enésimo proyecto de los verdiblancos no consiguió sumar ni un solo punto hasta el sexto partido de la liga. Ahora, tras dos victorias consecutivas pero conseguidas con mucho esfuerzo y por la mínima, el Atarfe Industrial se encuentra en línea ascendente para salir cuánto antes de la zona de descenso que esta temporada se habían propuesto no tocar en la medida de lo posible.
El joven entrenador Jorge Moreno, ligado al Atarfe desde hace muchos años, esperaba como agua de mayo estos resultados positivos en los marcadores y en el casillero de la tabla del Grupo IX para que el nuevo bloque formado en la población granadina empiece a creer en sí mismo. La política de fichajes ha sido la de dotar de más experiencia a la plantilla, que para esta temporada 2018/2019 es prácticamente nueva a la de la campaña pasada. El central Sergio Bustos, 35 años y con amplia experiencia en Segunda B y Tercera; Moi Gómez, interior de 33 años y con muchos minutos en equipos granadinos de Tercera y el ex de Maracena y Huetor Tájar Miguel Jiménez (que lo ha jugado todo de momento) son la muestra de ese valor añadido que dan los años. La idea es conjuntar esas nuevas caras con el pequeño bloque que queda del año pasado pero que está cargado de ADN verdiblanco, encarnados en Najib, Marcos Toro y Juanma.
El tremendo hándicap que tiene por delante el conjunto granadino es la defensa, ya que en lo que llevamos de campeonato no han podido dejar su portería a cero. A eso se le suma múltiples bajas cebándose especialmente en la zaga. Para el partido contra los largartos, serán baja el portero Darío y los defensas Pichel, Gálvez y Santamaría. También será duda Marcos Toro, el eterno lateral izquierdo verdiblanco. El mayor peligor del Atarfe Industrial lo lleva el ariete Jordi, enrachado con dos goles en el último partido y ya lleva tres, esperando superar los 10 que consiguió el año pasado en el Maracena.
También podríamos decir que este partido tiene un poco de pesadilla para el Real Jaén, ya que precisamente su primer partido en la temporada pasada, tras el trágico descenso de la Segunda B, fue ante el Atarfe Industrial. Y fue una derrota. Un baño de realidad para aquellos que pensaran que la Tercera iba a ser pan comido.