Hablar de padel en Jaén es hablar de Antonio Luque (Alcaudete, 9 de septiembre de 1987). Los aficionados jiennenses al padel jiennense guardarán un grato recuerdo de su excelente participación en el Jaén Open 2018, cuando el alcaudetense logró colarse en el cuadro final y jugar frente a la Catedral de Jaén.
Durante la pasada temporada, Antonio inició un proceso de cambio, que lejos de ser traumático no hizo más que multiplicar su exponencial progresión hasta límites que el propio jugador jiennense quizás desconocía.
Tras varios años liderando con mano de hierro el ranking provincial, junto a su inseparable amigo Juan Ortega, Antonio Luque se desplazaba hasta Oporto para dar comienzo a una nueva etapa profesional que le ha llevado a ser el primer jugador no portugués en liderar el nº 1 del ranking nacional de Portugal.
Un proceso en el que ha estado acompañado por un gran anfitrión como Diogo Rocha, que el propio jugador jiennense define como una pieza fundamental en esa transofmración. Después de un año en tierras lusas, Luque destaca que «el padel está teniendo un crecimiento espectacular en Portugal, estoy seguro de que aún falta mucho y estoy muy contento de aportar mi granito de arena para que así sea».
Una inoportuna lesión de su compañero Diogo Rocha a pocas semanas de que World Padel Tour levante el telón, ha llevado al alcaudetense a confirmar a Javier González Barahona como compañero de pista para los tres primeros torneos del año. «La idea es volver con Diogo, dependiendo de cómo evolucione en su recuperación», señala Luque.
La distancia ha dificultado la preparación de Luque y Barahona pero «por suerte Javier es un jugador joven con mucha proyección y estoy convencido de que lo vamos a hacer bien, cuando hemos entrenado juntos las sensaciones han sido buenas».
Evitar lesiones siempre es uno de los pensamientos de cualquier jugador pero, sin duda, esta temporada Antonio Luque ha fijado sus esfuerzos «en llegar lo más lejos posible en cada torneo para alcanzar el cuadro final la mayor cantidad de veces posible e incluso si se puede avanzar alguna ronda más».
Mejorar esos resultados sería el motor necesario para ascender peldaños en el actual ranking (nº 52), añadiendo puntos que lleven al jugador alcaudentense hasta el objetivo concreto de llegar al nº 50 de la clasificación masculina.
Jugar en Jaén, contar con el apoyo del público en cada partido, avanzar una ronda tras otra. Una sucesión de hechos que derivaron en el mejor momento de la pasada temporada para Antonio Luque, jugar en la central de la Catedral de Jaén, levantar la cabeza y ver que toda la grada estaba con él.
¿Repetir lo mismo esta temporada? «Lo firmaría sin duda, llegar al cuadro final del Jaén Open 2019 sería algo espectacular teniendo en cuenta el gran nivel que hay hoy en día en las fases previas de cualquier torneo World Padel Tour. Sentir el apoyo de la gente en los seis partidos que jugamos fue algo único», afirma el de Alcaudete.
La lista de buenos recuerdos del 2018 no se detuvo en Jaén. Antonio guarda en su disco duro un grato instante como el vivido en el Granada Open de 2018 cuando rozaba su mejor resultado del año a las puertas de unos cuartos de final, pero a la vez el más duro «por la forma en que se nos escapó la clasificación con dos bolas de partido a favor».
El desarrollo de un año en el que Luque valora positivamente cómo ha evolucionado su juego, principalmente «en la parte física, algo que me permite ser un jugador más agresivo sobre la pista y más peligroso».