Diego M. Díaz Salado // @dmdiazsalado
El ciclista jienense exhibe su mejor versión en esta prueba de los Alpes franceses finalizando séptimo tras perder las opciones del podio en la última etapa
A punto ha estado de caer el primer podio de una general en profesionales para José Manuel Díaz Gallego. El joven ciclista jienense finalizó en séptima posición en el montañoso Tour de Saboya, oficialmente Le Tour de Savoie Mont Blanc, de categoría 2.2 y que se celebra tradicionalmente a finales de junio en los departamentos de la Saboya y la Alta Saboya francesa, con perfiles exigentes y un importante desnivel acumulado.
Una prueba dura en terreno alpino en la que Díaz Gallego ha podido demostrar sus condiciones escaladoras con los colores del Vorarlberg Santic, equipo austríaco en el que se enroló a principios de año.
El jienense no pudo mantener el segundo puesto en la general que se labró el sábado en una explosiva etapa de 50 kilómetros y dos puertos con porcentajes altos, ya hubo otro sector ese día, en la que finalizó segundo a 55 segundos del vencedor, acrecentando sus opciones de subir por primera vez en su tercer año como profesionales a un podio de una carrera por etapas.
El objetivo se desvaneció en la jornada final de este domingo de 135 kilómetros y un desnivel acumulado de 4.500 metros. Tres puertos (entre ellos el conocido por ser un habitual del Tour: Col de La Croix de Fer) y final en alto con una última ascensión de 15 kilómetros y casi el 8% de desnivel medio.
Fue en ese puerto decisivo, a cuatro kilómetros de meta, cuando el jienense no pudo soportar el ritmo de los, a la postre, vencedores finales, el australiano Chris Harper (ganador por delante de Díaz Gallego el sábado), el italiano Pierpaolo Ficara y el francés Jeremy Bellicaud.
El jienense finalizó en décima posición, a más de cinco minutos del vencedor, dilapidando sus opciones de acceder al cajón de honor: “Las impresiones han sido positivas y negativas. Esperaba hacer un buen Tour de Saboya, con la parte positiva de hacer segundo el sábado. La parte negativa es que este domingo, aunque me encontraba bien, he reventado en el último puerto, perdiendo mucho tiempo”, analiza para El Deporte de Jaén.
Pese a este regusto amargo de la etapa decisiva, Díaz Gallego ha dado el do de pecho para el Vorarlberg Santic, siendo el corredor más destacado de la escuadra austríaca en los Alpes. En terrenos escarpados y cuando se acumula desnivel y porcentaje, el jienense demuestra ser un corredor solvente y regular en el circuito europeo continental.
Esta temporada en la que aún no ha llegado a los 40 días de competición, ya ha sido séptimo en Saboya, 12º en la Flecha del Sur en Luxemburgo o 22º en la general de una impronunciable prueba austríaca, Oberösterreichrundfahrt, donde trabajó para favorecer la victoria final de su compañero Jannik Steimle.
Más allá de esos últimos kilómetros, Díaz Gallego hace un “balance positivo” del Tour de Saboya, afirmando que le servirán para ir “con buen sabor de boca” a los próximos campeonatos de España de fondo en carretera, que tendrán lugar en Murcia el próximo fin de semana, y en los que espera hacerse ver.
El recorrido, rompepiernas y con varias ascensiones cortas y explosivas, le puede venir propicio, aunque el nivel participación en el nacional es de máximo nivel. Tendrá la oportunidad, eso sí, de competir en la península, un hecho inédito para el joven ciclista profesional en esta temporada 2019.
A partir de ahí, será de la partida como pieza clave de su equipo en el Tour de Austria, la cita más importante de su equipo, que tendrá lugar a partir del 6 de julio. Díaz Gallego, que afirma estar “contento” con su desempeño en 2019, replanteará su calendario a partir de la ronda austríaca, con intención de mostrar buen golpe de pedal en pruebas montañosas, las que mejor se le pueden adaptar.