Alejandro Copete | @Ale_Copete
Un duro y frío invierno se está viviendo en el barrio malagueño de El Palo. El conjunto paleño no conoce la victoria desde el 15 de diciembre del año pasado.
Desde entonces, seis jornadas consecutivas sin sumar tres puntos les han condenado a estar a 9 puntos de la zona de playoff. Los siempre favoritos El Palo FC son ahora novenos en la tabla, que delata su irregularidad esta temporada.
Uno de los ingredientes de esa mala racha está siendo la fragilidad defensiva del equipo entrenado por Funes en su tercera temporada consecutiva en el banquillo del San Ignacio.
Con 33 goles en contra en total son el segundo peor registro de los diez primeros clasificados y en las últimas cuatro jornadas han encajado la friolera de 11 goles (cuatro de ellos en la goleada que sufrieron ante el Loja en la última jornada). La ausencia del guardameta Reina, uno de los pilares de este equipo, está pesando negativamente.
Para intentar dar una vuelta a la situación, el mercado de invierno del Palo FC ha sido muy activo con la marcha de jugadores secundarios como Juli o Eloy (estos llegaron el pasado verano, por lo que también puede afectar a cuando se hagan balances sobre los fichajes a final de temporada) y la llegada de refuerzos, sobre todo para la zona medular.
Quizás el más simbólico para la entidad y afición es el regreso de Javi López a la escuadra paleña como cedido por el Marbella, donde no ha tenido demasiados minutos en la Segunda B.
También han llegado Óscar Lozano procedente del Ejido, el portero Artimio con pasado en el Grupo X de la Tercera División y Roberto Sierra, de la Gimnástica Torrelavega del Grupo III de Tercera.
Esas caras nuevas vienen a reforzar un bloque donde está destacando con creces el central Lulu (con muchos minutos en Segunda B a sus espaldas) y el centrocampista Borja López, que ya a principios de temporada apuntaba a ser uno de los dueños del centro del campo paleño.
Mientras Pepe Capitán se reencuentra a sí mismo (solamente cinco goles de momento y con largas sequías goleadoras, muy lejos de los registros de años anteriores) la responsabilidad de anotar los goles está recayendo en el interior izquierdo Escardó, que suma 13 tantos.
Pese a la mala racha, San Ignacio siempre será un lugar temible para los rivales. Mientras que El Palo FC quiere achuchar para no perder del todo el tren de la pelea por el ascenso, el Real Jaén llega al partido en medio de una tormenta.
Lo que viene siendo habitual para el conjunto lagarto en los últimos tiempos. El Palo, el barrio malagueño donde el fútbol es más especial todavía, les esperan con la mezcla de viejos ídolos y jóvenes promesas que se ha convertido en la seña de identidad de los malagueños.